La Asociación de Catedráticos de Instituto de Andalucía (ACIA) ha pedido que se potencie "la labor profesional de los docentes" en la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) liberándolos "de las tareas administrativas con las que se les ha cargado, y que sólo sirven para agobirles y ofuscarles". Así lo solicitó ayer Miguel González, presidente de ACIA, en la reunión del grupo de trabajo sobre convergencia educativa celebrada en el Parlamento de Andalucía.

    González insistió que en la educación andaluza "hay que quitarles las tareas burocráticas a los docentes para que puedan centrarse en las tareas didácticas". De la misma manera, ACIA pide que se "reconozca la labor social del profesorado y se dignifique la enseñanza, ya que esto es algo que se ha perdido durante las últimas décadas".

    Durante su intervención, el presidente de ACIA recordó que "la ESO es donde mayor número de fracaso escolar se da", y que uno de los principales problemas a los que se enfrentan los docentes andaluces "son los 'objetores escolares', es decir, aquellos alumnos que están escolarizados obligatoriamente, pero que no quieren estarlo y dificultan la enseñanza".

    Como alternativa para estos casos que ralentizan la tarea docente, González señaló que la Consejería de Educación "debería establecer alternativas, con itinerarios que permitan darle a cada alumno lo que más necesita", así como aumentar "los cursos de cualificación profesional para dar salida a los 'objetores escolares'".

    Asimismo, desde ACIA han incidido que "el Bachillerato ha bajado mucho la cantidad de sus contenidos, ya que lo que antes se daba en los 4 años de BUP y COU ahora se hace en sólo dos". Por estas mismas razones, González aseguró que una buena solución sería "que el Bachillerato pasara a durar tres años, para dar una educación de calidad".

    Por último, el presidente de ACIA recordó "la necesidad de un pacto por la educación, tanto social como político, para conseguir una estabilidad educativa al menos por veinte años, sin tener en cuenta los cambios políticos".

    Según González, este pacto debería tener en cuenta "las etapas educativas y su duración concreta, las titulaciones y las formas de promoción a las que podrá optar el profesorado".

    La portavoz  en materia educativa del PSOE, Araceli Carrillo, consideró que "es necesario el consenso a través de un pacto que va más allá del acuerdo político y que incluye al conjunto de la sociedad, a la concertación social y a los medios de comunicación públicos y privados". Asimismo se mostró crítica ante la idea de establecer itinerarios diferenciados en la ESO "porque parece que se quiere que el alumno bueno, listo y guapo vaya a Bachillerato mientras el torpe y feo vaya a FP".

    Por su parte, el PP consideró que "puede que la solución no esté en ampliar un año el Bachillerato, sino en hacer una ampliación antes, en la ESO".

    Asimismo, el portavoz del grupo IULV-CA, Ignacio García, se mostró de acuerdo con el presidente de ACIA al señalar la "importancia de tener en cuenta la investigación realizada por los docentes a la hora de valorar sus méritos", y la necesidad de establecer "un pacto amplio sobre la educación".